Fortuna poco valorada

A raíz de los acontecimientos que se producen alrededor del mundo y que podemos observar diariamente en la televisión, da que pensar en lo afortunados que somos. Lorca amanece desgraciada, pero en el mundo hay otros lugares donde se viven momentos escalofriantes; Libia, Missisipi, Fukushima…

Doy gracias de poder constar esto sin tener que vivirlo en persona, aunque más gracias daría, obviamente, si toda la gente que está sufriendo, no tuviera que sufrir, valga la redundancia. Problemas que siempre están, como la pobreza, la miseria, la injusticia, la desigualdad, el hambre, el maltrato, la guerra, y los que se me olvidan….

Y yo soy lo bastante capullo como para no valorar la suerte que tengo de poder estudiar a mi ritmo, relajadito, en mi habitación, y disfrutar luego de momentos en los que descansar. No se valorar lo que tengo hasta que veo las imágenes de esa pobre gente que daría lo que fuera por estar como yo.

Da la sensación de que nos gusta crearnos problemas cuando no los tenemos, y luego, cuando no tenemos a nuestro alcance todas esas cosas de las que disponemos diariamente, nos entra el añoro. ¡Infeliz, valóralo! ¿Tienes la felicidad ahí delante y no sabes verla? pues si no la quieres, dásela a otro.

Disfruta el momento, disfruta con lo que haces. Habrán mejores y peores momentos, pero hay que sacar el lado positivo de las cosas. Será inevitable entristecerse cuando veas las imágenes tan crueles de esas cosas que por el mundo suceden a diario. Y sin entrar a valorar lo que podemos hacer para arreglarlo (ya sabemos quien debe hacerlo), lo que está claro es que debemos agradecer lo que tenemos.