miércoles, 15 de junio de 2011

Harto de todo

Mosqueado, cansado, harto de esforzarme y no ver recompensado con un premio justo todo lo que hago. Soy muy exigente en ocasiones conmigo mismo, es un defecto quizá que tengo, pero no quiero pasar por el mundo siendo un don nadie. Quiero ser humilde, trabajador, honrado, pero que si hay un gran esfuerzo detrás, haya una buena recompensa, una especie de justicia, aunque sea poética.

Me he tirado dos meses haciendo cosas de la universidad, probablemente el peor mes de mi vida fue Mayo, cuando me tiraba el día haciendo un puñetero trabajo de Historia y estudiando derecho, luego estudie para historia de nuevo mientras seguía haciendo el trabajo. ¿Para que? Pues para sacar una nota que según mi opinión, no se corresponde con toda la faena.

En fin, una más de la colección, como me propuse cuando llegaran las vacaciones, a partir de este momento me tiene que dar igual todo. Solo quiero disfrutar, he esperado estos momentos con demasiada ansiedad, contando los días, horas, minutos, hasta segundos. No me voy a amargar ahora, paso de todo.

Desde hace muchos meses llevo planteándome si escogí bien la carrera, aunque también me planteo ahora si realmente quiero seguir estudiando. No se, no me agobiaré pensando eso ahora, lo que esta claro es que la Universidad ha pasado de ser un lugar donde iba feliz a ir amargado, a guardarle rencor. Intentaré por un par de meses desconectar absolutamente de ese lugar.

En estos días solo me preocupa una cosa, o por lo menos, esa es la intención; ser feliz. La de veces que he repetido esta frase. No quiero que nada me afecte, aunque los acontecimientos vendrán y me afectaran. Que quieres, soy una persona de “fácil depresión”. Pero bueno, mi objetivo es intentar mostrar que todo me da igual, y que de ahora en adelante, paso de todo.

2 comentarios:

  1. No me mola que estés así.
    El mundo no es justo ni siquiera poéticamente, es una mierda literal(mente) y poco se puede hacer para solucionarlo.
    Pero... debes saber que merece la pena por los pequeños momentos.
    Creo que te lo dige hace algún tiempo: Serás un buen periodista, rara vez me equivoco en estas cosas, así que hazme caso... además, no me puedes dejar aquí solo.
    No busques la felicidad donde no debes... creo que estás mirando en el cesto equivocado...

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  2. No te preocupes Pablo, que solo fue el calentón del momento, ahora en frio no pienso así, solo se que el proximo año me lo tomaré de forma distinta, me despreocuparé de la nota, tengo asumido que mi techo en un notable. Asi que afrontaré las cosas desde otra persectiva.
    Muchas gracias por estar ahi corazón, como compañero y amigo, tu te mereces matrícula de honor, y no te dejaré solo, para tu desgracia jeje

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